TODAS MIS GUERRAS es un
testimonio sin precedente en la vida mexicana. Además de su contenido,
amenidad, ironía, además de su felicidad literaria, el texto importa por su
valentía. ¿Cuántos generales o políticos o intelectuales mexicanos han abierto
su vida íntima al público? Cabalmente, sólo Vasconcelos. Pues ahora María Félix
les gana otra vez más la partida: sale de la penumbra, se engalla frente a los
reflectores y revela la verdad. Habrá quien señale errores u omisiones. ¿Qué
memorias —o incluso, qué biografías o historias— no los tienen? Finalmente, en
todos esos géneros, “los hechos, hechos son”. Pero aun los observadores más
exigentes convendrán que más allá de sus verdades, como sueños, María Félix ha
vertido en esta guerra literaria elementos de comprensión profunda hacia su
persona y personaje.
Enrique Krauze
Editorial Clío 1993